El comején devora la Cruz de San Clemente, en Coro
La Cruz de San Clemente (1527) es símbolo de la evangelización en Sudamérica devorado por las termitas. Foto Jesús Romero, octubre de 2018.
Docentes de restauración de la UNEFM están dispuestos a recuperar la Cruz de San Clemente, símbolo hecho con la madera del cují bajo cuya sombra se ofició la primera misa en Latinoamérica, en 1528. Solo piden los insumos para detener la termita voraz.
Eva Riera, @evariera. 24/10/2018.
El comején, que no perdona madera aunque no esté sucia o descuidada, se apropió de la Cruz de San Clemente, el icónico símbolo que en Coro, estado Falcón, recuerda el sitio donde fue celebrada la primera misa en Latinoamérica el 23 de noviembre de 1528, día de San Clemente.
Su base está literalmente cundida de este insecto que suele vivir en colonias de millones de individuos y está considerada una plaga por su poder de destrucción. Por si fuera poco, algunas avispas llegan con frecuencia a compartir la madera.
Comejenes y avispas se comen La Cruz de San Clemente, de 1527. Coro, Falcón. Foto Jesús Romero, 2018.
Como consecuencia, la cruz luce enormes vetas dentro de las cuales el bicho ha anidado. La Cruz de San Clemente representa un poderoso símbolo patrimonial por ser hecha del corazón del cují bajo el que un año después de aquella mencionada primera eucaristía fueron bautizados en la fe católica el Diao Manaure, líder del pueblo caquetío, su esposa e hija.
El rector de la ermita de San Clemente, sacerdote José Monsalve, está ocupándose de crear conciencia al respecto y hasta ha organizado tertulias, con café incluido, en el que participan fieles católicos. A estos les pide colaboración monetaria para la restauración de este bien patrimonial declarado monumento histórico nacional en 1960.
La Cruz de San Clemente está al lado de la ermita y él, como amante de la historia y apasionado de contarla, sufre al ver el estado en que se encuentra.
La cruz que cuenta una gran historia
José Monsalve, rector de la Ermita homónima, en cuya plaza se erige la Cruz, solicita que se restaure el símbolo hecho con la madera del cují bajo cuya sombra se ofició la primera misa en Latinoamérica. Coro, Falcón. Foto Jesús Romero, octubre de 2018.
“Una de las grandes historias que podemos contar los venezolanos es esta de la Cruz de San Clemente. Una de mis grandes preocupaciones es que esta cruz ha existido 491 años, es el signo de la fundación de Coro, de la erección canónica de la Diócesis de Coro como la primera de Latinoamérica por parte de Clemente VII, es decir, que este es el manantial, la fuente de la evangelización del continente desde aquí hasta la Patagonia en Argentina, y vemos su gran deterioro y es mi gran preocupación”, advierte Monsalve.
El padre Monsalve pide a la ciudadanía, organismos públicos y no gubernamentales que estén pendientes de esta parte de la historia rica en espiritualidad para “que la cruz no se termine de deteriorar porque el comején no destruye, sino que se la come y no vamos a tener ni para restaurarla. Este es un símbolo de nuestra esencia caquetía y estamos en el deber de cuidarlo y conservarlo. Pido el mantenimiento tanto de la ermita como de la cruz”, indicó.
La cruz está resguardada dentro de un templete de mampostería que se conserva en buen estado aun cuando fue construido en 1886, durante la presidencia de Juan Crisóstomo Falcón.
Buenas intenciones sin recursos
Eddy Salinas, docente del programa de Conservación y Restauración de Bienes Culturales Muebles de la Universidad Francisco de Miranda, UNEFM, asegura en su estudio Reflexiones sobre el deterioro de las obras de arte en los espacios públicos de la ciudad de Coro que en la década de los años 80 la cruz “tuvo una intervención bastante acertada, que contribuyó a detener el deterioro que la ponía en grave peligro”.
Indica que desde la UNEFM “se vienen haciendo esfuerzos para la conservación de nuestro patrimonio cultural, pero ante la falta de recursos y el caso omiso de los organismos públicos y privados, nuestras investigaciones y proyectos de rescate se quedan plasmados en el papel, esperando a ser tomados en cuenta, ojalá no lo hagan cuando ya sea demasiado tarde”.
Con voluntad, se puede recuperar
La Cruz de San Clemente rememora la primera misa oficiada en Sudamérica, en Santa Ana de Coro, en 1527. A sus 491 años, el comején consume este poderoso símbolo patrimonial. Foto Jesús Romero, octubre de 2018.
Nohé Gilson, director del programa de restauración de la UNEFM. Foto Jesús Romero, 2018.
El director del aludido programa de la UNEFM, Nohé Gilson, informó que la cruz y su monumento requieren un trabajo de conservación por especialistas, ya que se observan en algunas de las paredes del templete que están golpeadas, han perdido su friso y pintura.
-Claro que se puede recuperar. Requiere un proceso de limpieza y remoción del barniz oxidado para una nueva incorporación del mismo. Además, hay que hacerle con urgencia un nuevo tratamiento y protección a la madera ya que las vetas se abrieron dejando unas enormes grietas. También necesita una fumigación a toda la pieza ya que al final del madero vertical en su base se aprecian galerías de comején –explicó.
Gilson cree que, una vez adquiridos los químicos necesarios para hacer esta restauración, el personal de la UNEFM puede efectuar la tarea junto con los estudiantes. Pero no hay dinero para esta compra.
Monsalve agregó que a la ermita también le hace falta mantenimiento, sobre todo pintura: “Somos tierra de turismo y fe, cualquiera viene y le cuento la historia. Les dejo de tarea a los niños que investiguen quién era la princesa Judibana. Esto es un faro para todo el mundo y por eso es importante que mantengamos estos bienes patrimoniales bien conservados para que puedan ser admirados por muchos años más”, indicó el prelado.
Fuentes consultadas
Gilson, Nohé. Director del programa de Conservación y Restauración de Bienes Culturales Muebles de la UNEFM. Entrevista realizada el 19 de octubre de 2018.
Instituto del Patrimonio Cultural. Catálogo del patrimonio cultural venezolano, estado Falcón, municipio Miranda.
Monsalve, José. Rector de la Ermita de San Clemente. Entrevista realizada el 24 de septiembre de 2018.
Salinas, Eddy y Zachenka Acurero. Reflexiones sobre el deterioro de las obras de arte en espacios públicos de la ciudad de Coro, 2017.
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Los organismos competentes son quienes manejan los recursos del Estado, y son quienes deben apoyar estas iniciativas de Salvaguarda patrimonial, éste Patrimonio, posee un valor colectivo que debe ser restaurado y conservado porque encierra en él, la memoria histórica de nuestros procesos históricos latinoamericanos; más aún que en el Estado Falcón, contamos con los expertos en el área de intervención de bienes muebles, quienes están dispuestos a colaborar y dar sus aportes al respecto. Es pertinente utilizar los medios de comunicación locales y nacionales, para dar a conocer esta necesidad y puedan llegar los ecos a quien si de respuesta en la facilitación de recursos pertinentes para esta labor.