Ermita de Nuestra Señora de Coromoto y de Fátima

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Nombre: Ermita de Nuestra Señora de Coromoto y de Fátima.

Año: Construida en 1970, remodelada entre 1998 y 1999 y reinaugurada en 1999.

Autor (de la remodelación de 1999): Nicolajs Sidorkovs.

Tipo de patrimonio cultural: Inmueble.

Administrador custodio o responsable: Arquidiócesis de Caracas.

Descripción
Historia
Ubicación
Fuentes consultadas

Descripción

La edificación de la Ermita de Nuestra Señora de Coromoto y de Fátima data de la década de 1970. Fue necesario realizarle una intervención pues llegó a encontrarse en total estado de abandono. La estructura existente le fue entregada a la comunidad portuguesa de Caracas, la cual decidió remodelarla y ubicar en sus estructuras la Misión Católica Portuguesa. El proyecto de rehabilitación y remodelación de la estructura original fue llevado a cabo por el arquitecto Nicolajs Sidorkovs entre los años 1997 y 1998. Las obras se ejecutaron entre los años 1998 y 1999 y se reinauguró el día 13 de octubre de 1999.

Historia

Durante la elaboración del proyecto y ejecución de las obras participaron Manuel Pires Días, los arquitectos Juan Da Silva y Doménico De Vincentis y el ingeniero Oscar Faneite, quienes se encargaron del diseño de la iluminación. La artista Adriana Franco fue la responsable de los vitrales ubicados en el altar y bóvedas laterales de la nave de la iglesia.

La intervención consistió en la realización de diferentes cortes de la estructura de la cubierta, la cual originalmente poseía un aspecto geométrico, monótono y opresivo. El espacio se hizo más dinámico y los feligreses lo percibieron y lo apreciaron. Los cortes de la antigua estructura generaron un escalonamiento de menor a mayor desde el área de acceso. A

lo largo de esta cubierta ascendente hacia el área del presbiterio aparecen una serie de pliegues que proporcionan una adecuada entrada de luz natural al espacio interior de la iglesia, que se proyecta hacia el altar. A ambos lados de la nave se ubican una serie de bóvedas que sirven como altares laterales, compuestos por muros y vitrales. En el altar mayor se ubica un gran vitral que abarca la totalidad del espacio de fondo con la imagen del Cristo resucitado. Debajo del vitral hay un espacio central compuesto por un volumen semicircular que sirve de fondo al oficiante.