El Museo de Arte Colonial de Caracas atesora esta cajita del siglo XVIII que habla de la vida cotidiana de la Venezuela de antaño. Realizada en sólido cedro, refleja la próspera ebanistería y herrería de entonces.

Nombre: cajita de la Santísima Cruz / cofre o arcón de cedro.

Autor: anónimo. Caracas.

Técnica: torneado y ensamblado

Dimensión: 19 x 30,5 x 19 cm.

Año: segunda mitad del siglo XVIII.

Tipo de patrimonio: tangible / Mueble.

Administrador custodio o responsable: Museo de Arte Colonial / Dr. Carlos Federico Duarte.

Historia
Descripción
Valores patrimoniales
Situación actual
Ubicación
Fuentes consultadas

Historia

Los muebles siempre han sido un objeto imprescindible en cualquier casa, sea gente rica o pobre. Pero del siglo XVIII caraqueño quedan muy pocos. Esa es la razón por la cual una caja pequeña como la que hoy estamos describiendo se convierte en un patrimonio cultural del país. Ella nos habla no solo de la técnica empleada en su fabricación o del momento histórico, sino de la vida cotidiana de las personas e instituciones, sus rutinas y sus gustos. Nos habla de la historia menuda que muchas veces no aparece en los libros, pero que en conjunto definió las costumbres y algunas formas de comportarnos que se mantienen.

El uso de arcones es muy antiguo, fueron utilizados por los egipcios, griegos y romanos. Su nombre nos remite a palabras como: arcas, cofre, cajón. Su función principal era el guardar bienes de valor. Sus dimensiones y formas han variado a lo largo del tiempo, de acuerdo a los gustos y necesidades. Van desde lo más sencillo, que es un arcón sin divisiones (como el que estamos presentando aquí), hasta los más sofisticados con varios compartimientos, forrados en telas, tallas en relieve, entre otros elementos. Sabemos un poco más sobre estas piezas porque se realizaban avalúos para los testamentos y ahí se especificaban todas las propiedades, incluyendo los objetos de todo tipo que guardaban.

En este caso tenemos un pequeño arcón de cedro, cuya función se relacionaba con los bienes de la Santísima Cruz en Caracas (Duarte, 2007). Se podría inferir que guardaba bienes de valor, puesto que tiene una cerradura con pestillo bastante elaborada, lo cual nos remite a la herrería, uno de los oficios más importantes de la Caracas colonial.

Se empleaba para muchos ámbitos de la vida cotidiana (cocina, construcción, elaboración de objetos y herramientas). En Caracas fue un sector laboral relevante, tanto que las autoridades debieron propiciar la creación de una organización gremial que estableciera normativas para el ejercicio de este oficio (Duarte, 2007). El siglo XVIII fue un periodo próspero para la economía y eso se hace sentir en el florecimiento de importantes artesanos y piezas de valor artístico y estético, aun en su simplicidad, como es esta pieza.

Descripción

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Caja en forma de paralelepípedo con tapa, elaborada con láminas enteras de cedro. Cuatro patas torneadas. Dibujos esgrafiados en el frente. Dos goznes (bisagras) y una cerradura al frente en forma de corazón con pestillo que fe elaborada en hierro forjado. En la tapa existe un grabado cerca del borde posterior que dice «De la SSma Crus».

Valores patrimoniales

Esta caja pequeña del Museo de Arte Colonial de Caracas testimonia la vida cotidiana del siglo XVIII, un período próspero de Venezuela en los ámbitos de la ebanistería y la herrería.

Dentro de la diversidad de bienes patrimoniales del periodo colonial los muebles son quizás uno de los más frágiles, pues existen muchos factores que contribuyen a su deterioro. Tales como: el uso diario, humedad, cambio de moda, intensidad de la luz solar o las condiciones ambientales. Por demás, algunos muebles provenientes de Europa eran atacados rápidamente por los insectos tropicales. Los muebles que nos han llegado hasta hoy, como esta pieza que se resguarda en la Quinta de Anauco, es una muestra de la diversidad de bienes, la calidad de la técnica, los profesionales y su formación, entre otros datos relevantes para poder valorar este periodo de la historia venezolana.

Situación actual

En regular estado de conservación. La pata delantera del lado izquierdo está rota.

Ubicación

Museo de Arte Colonial, Quinta de Anauco. San Bernardino, municipio Libertador, Caracas.

Fuentes consultadas

Duarte, Carlos F. (2007). Historia de la Herrería en Venezuela. Período Hispánico. Caracas: Sidetur

Carlos Duarte. (s/f). Mobiliario y decoración interior durante el periodo hispánico venezolano. Caracas: Armitano

Investigación: Zaida García Valecillo.

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